El presidente de la Cámara Marítima de Ecuador (Camae), Juan Jurado, aseguró que su país llegó tarde a los desafíos planteados a los puertos de la región por la ampliación del Canal de Panamá.
En entrevista con PortalPortuario.cl, el dirigente gremial sostuvo que el Gobierno de su país tuvo una reacción tardía a diferencia de lo que hizo Colombia, Perú y Chile que preparó a sus puertos que ya son capaces de recibir naves neo panamax.
En esa línea, Jurado fue enfático en que Guayaquil tiene que defender su posición como principal puerto ecuatoriano, asegurando que el proyecto de Puerto de Aguas Profundas de Posorja, concesionado por DP World, será complementario a la actividad portuaria guayaquileña.
¿En qué pie queda el sistema portuario frente a la construcción de un megapuerto en Posorja?
Guayaquil tiene que defender su capacidad como puerto del Ecuador, existen otros proyectos portuarios en otros puntos del país y esta inversión es sumamente importante, especialmente, en conexión con el dragado del canal de acceso a Guayaquil, porque de alguna manera complementa ese espíritu que queremos darle a la ciudad de Guayaquil para mantenerse dentro del tráfico marítimo, a pesar de sus problemas de calado. Posorja, a la entrada del Golfo de Guayaquil, es un proyecto complementario, lo sabemos porque con el correr del tiempo, el problema del calado sería un problema aquí y Posorja podría tomar parte de ese mercado, pero Guayaquil se mantiene como el puerto más importante de Ecuador.
En ese contexto ¿Por cuánto tiempo más Guayaquil podría ser el puerto más importante de Ecuador?
Guayaquil es, después del Callao, el puerto que más contenedores ha movido el año pasado en el contexto de la costa sur del Pacífico sudamericano y uno de los problemas que hemos tenido es por falta de decisión estatal es que nos estamos quedando atrás en responder a los cambios que se están dando a nivel mundial e incluso regional en respuesta al mayor tamaño, calado, eslora, manga de los buques y un aspecto muy importante es que los nuevos buques no tienen maquinaria propia para autodescargarse. En ese sentido, ha sido una preocupación nuestra ver cómo los demás puertos de América Latina agarraron ese desafío mucho antes que el Ecuador desde el punto de vista oficial, donde hemos tenido mucho atraso para responder a este desafío.
¿Llegaron tarde a la apertura del Canal de Panamá?
Sí, llegamos tarde al canal de Panamá. Si usted se fija Callao está recibiendo buques de calado de casi 15 metros, lo mismo en Valparaíso y San Antonio que están recibiendo buques de nueva generación post panamax. Guayaquil se quedó y Posorja es una respuesta a eso, pero una respuesta relativamente tardía.
Aún así, ese puerto requiere dragado, lo que también beneficiaría a Guayaquil… ¿Cómo ve ese proceso?
El municipio tomó bajo su compromiso el dragado del canal para mantener a Guayaquil por lo menos por un par de décadas más como un puerto realmente activo, a pesar de su problema del canal, pero eso no es todo, porque se necesita atender la demanda de esos nuevos buques con inversiones como la de TPG.
¿Fue Colombia más rápido en comprender los desafíos de la industria?
Creo que Buenaventura es un puerto que se ha desarrollado más rápido que nosotros. Colombia entendió el reto más rápido que nuestro gobierno e invirtió en Buenaventura, entiendo que no está a plena capacidad, pero cuando lo esté será un puerto capaz de competirle a cualquiera.
¿Incluso a Guayaquil?
La carga del Ecuador es para el Ecuador, no es para Colombia, pero siempre existe el riesgo de que las nave dejen de recalar a Ecuador por no haber facilidades para estas nuevas naves y tendríamos que abocarnos a recibir servicios feeder y una vez que el calado sea dragado a 12,5 metros con marea alto, Guayaquil estaría en capacidad de recibir buques de nueva generación, no Triple-E porque aquí en la costa sudamericana no existe el mercado para esas naves, pero sí para las post panamax.